Con la presencia de autoridades diplomáticas, legislativas y municipales, el Orfanato Hogar El Faro Niños Para Cristo celebró ayer un encuentro con el destacado chef Israelí Shaul Ben Aderet, donde aprovecharon para pedir al Gobierno una mayor partida presupuestaria que pueda garantizarle una mejor calidad de vida a los niños huérfanos que ahí residen.
Y es que con la ayuda de 66 mil pesos mensuales que los directivos del orfanato reciben por parte del Estado, no es suficiente para atender a las múltiples necesidades que tienen los 19 niños y adolescentes en materia de salud, educación, medicina, alimentación y tratamientos.
“Siempre hay necesidades, pero Dios se encarga de suplirnos”, dijo Margarita Álvarez, la directora, quien junto a Antonio Perdomo realiza una titánica labor en esta institución, ubicada en la calle Club de Leones 219 del sector de Alma Rosa, donde los niños reciben formación, cariño y un techo.
Como una forma de palear la situación en la viven los menores de edad, el embajador de Israel, Daniel Biran; la diputada Karen Ricardo, y el alcalde Alfredo Martínez, junto con líderes religiosos compartieron junto al chef israelí Ben-Aderet, quien los instruyó de una forma divertida en la preparación de platos sencillos, como pizza, pastas, humus, salchichas y ensalada.
El embajador Biran dijo sentirse feliz de poder hacer sonreir a estos niños, en esta labor social que sin dudas disfrutaron con las ocurrencias del chef y los regalos hechos por la embajada.
